Valparaíso, septiembre 2008
Estimada Katrina Sanguinetti
Concejala
A propósito de la conversación de hace unos días, me gustaría reforzar los argumentos que expuse en esa oportunidad, pues creo que tu estás por lo mismo que nosotros en el Cerro Esperanza, por la defensa de la ciudad, por un Valparaíso sustentable.
En el Cerro Esperanza, y en especial en la Unidad Vecinal Nº 1, no creemos que la construcción de un MALL sea un aporte para la ciudad, ya que rompe con su fisonomía y tradición.
Por cierto que Valparaíso necesita más empleo, necesita mayor desarrollo, pero ese desarrollo debe estar proyectado estratégicamente, es decir, pensar el futuro con los vecinos, con la ciudadanía. Porque la pregunta es ¿qué es lo que necesita Valparaíso como ciudad? Y te aseguro, que la respuesta no está en convertir la ciudad en un mercado persa.
La construcción de un Centro Comercial de la magnitud que está proyectado, obedece a un tipo de sociedad que no contribuye, en lo absoluto, al desarrollo sustentable de las personas, ya que el consumo, como tal, instala lógicas individualista. Un vecino con una tarjeta de crédito no necesita a los otros, pues todo lo que requiere como individuo lo consigue a través del consumo. El consumo no es colectivo, es individual. El consumo no es democrático, se sustenta y se reproduce en la desigualdad.
Si pensamos y proyectamos a la ciudad de Valparaíso, debiéramos soñarla con todos, entre todos y para todos, no solamente para aquellos que pueden comprar y consumir.
El MALL es una propuesta ideológica, y eso tú lo sabes, por lo mismo, si nos permitimos soñar nuestra ciudad, y a la vez instalar la discusión en barrios y cerros, con las organizaciones sociales, estaremos haciendo nuestro trabajo como ciudadanos responsables. Puede que la gran mayoría esté de acuerdo con la construcción, eso lo puedo entender (como lo conversamos), pero de las autoridades espero una visión estratégica. Démonos una oportunidad para hacer algo, transformemos esta crisis en una oportunidad.
Valparaíso, posee una identidad que se ha ido construyendo con elementos que otras ciudades no tienen, su fisonomía arquitectónica, cerros y plazas, las personas, el mar, el mar de Valparaíso. Estos rasgos son los que permitieron que se convirtiera en ciudad Patrimonial. Ahora bien, con todo esto, la construcción de un centro comercial, objetivamente, ¿forman parte de la historia e identidad de Valparaíso?
Yo se que estos antecedentes tu lo conoces y los manejas, por lo mismo, es extraña tu contradicción. Es por eso que insisto, podemos pensar la ciudad, y en el corto plazo, transformarla, y eso es soñar, construir utopías.
En cuanto a los temores que señalaste en nuestra conversación, creo que el contrato especifica perfectamente de que estamos hablando, no hay espacio a dudas.
Es llamativo que a las organizaciones sociales se nos haya vendido el proyecto como una obra social y no como un negocio. El discurso que instalaron es perverso, desinforma, impidiendo la construcción de una opinión crítica, ya que parece que los grandes espacios públicos eran más importantes, para la empresa, que su propio negocio, el arriendo de locales comerciales, el arriendo de espacio comercial. Eso deja un manto de dudas suficiente como para dudar de los beneficios del proyecto.
Bueno, espero que estas palabras te ayuden a resolver tus contradicciones, se despide Atte.
Marcelo Beltrand Opazo
Presidente UV Nº 1
Cerros Esperanza - Valparaíso
